La piel es el órgano más extenso y es un fiel reflejo de la salud vascular. Una buena circulación sanguínea y linfática garantiza que la piel reciba los nutrientes y el oxígeno que necesita para mantenerse sana y radiante. Pero con el tiempo, es común tener problemas vasculares que afectan a la cicatrización, como la hipertensión o la insuficiencia venosa.
Por eso, es importante cuidar la piel y saber qué pequeños gestos cotidianos pueden ayudar a la hora de prevenir y tratar pequeñas heridas de manera eficaz. Te contamos todos nuestros consejos en esta guía completa.